Comentario
sobre la iglesia de Santa Sofia.
La
catedral de Santa Sofía de Constantinopla fue construida bajo el
mando del emperador Justiniano durante la Primera Edad de Oro del
arte Bizantino, su construcción abarcó desde el año 532 hasta el
año 537. Se construyó con materiales diversos, desde mármol para las
columnas hasta piedra y ladrillo para los muros. Cabe recalcar que la
catedral fue transformada en mezquita tras la toma de la ciudad por
parte del imperio otomano.
En
cuanto a su planta podemos ver como combina dos esquemas conocidos
como lo son la planta basilical y la de cruz griega, cubierta por una
cúpula, tomando del modelo basilical teniendo tres naves
diferenciadas, siendo la central la más ancha. De la planta de cruz
griega, en cambio, la forma de cruz inscrita en un rectángulo. La
cúpula se apoya en 4 pilares que a través de 4 pechinas
redistribuyen el peso de tan enorme cúpula.Solucionado
el
problema
del paso del cuadrado al círculo gracias a las pechinas, la
gran
cúpula también fu
posible
gracias
a que en
su construcción se emplearon tanto piedra porosa como teja, para
hacerla menos pesada, además
de la presencia de múltiples ventanas que ayudaron a reducir aún más
el peso.
En
el exterior, el edificio se concebía como un ejemplo de equilibrio,
con nítidos volúmenes, que dejaban ver la estructura interior, con
los materiales desnudos y sin decorar. Los minaretes actuales son una
adición realizada por los otomanos a raíz de la ya mencionada
conquista de la ciudad. En el exterior, el edificio se concebía como
un ejemplo de equilibrio, con nítidos volúmenes, que dejaban
traslucir la estructura interna, con los materiales desnudos, sin
decorar. Recordemos que los minaretes que presenta en la actualidad
son un añadido posterior a la toma de los turcos de Constantinopla.
En
el interior, en cambio, el efecto es otro. Se trata del espacio más
importante, dominado por la gran cúpula que, a causa de las ventanas
del tambor parece estar ingrávida, elevándose en el aire. La cúpula
acentúa la concepción de espacio central como un símbolo celeste
por estar más cerca del cielo, por tanto representa a la Divinidad,
que también se manifiesta por la luz que emana de ella a través
de las ventanas, aunque no debemos olvidar que las
columnas
crean también una tensión longitudinal de esencia basilical.
Esta
iglesia es un lugar dedicado tanto a la glorificación de Dios como
del Emperador, con una jerarquización del espacio que deja traslucir
el rígido protocolo de la corte, reflejo de la influencia oriental
en la cultura bizantina.
Comentarios
Publicar un comentario